La pasión por los videojuegos
El boom de las consolas ha irrumpido en nuestra sociedad
desde hace algún tiempo con gran fuerza, pero realmente preocupa en las
familias el uso y abuso que se hace de las mismas por parte de sus miembros y
en especial de los hijos.

Suponen también parte de lo cotidiano en la vida del niño y
acaparan la atención en la conversación.
Según algunos psicólogos, un niño debe jugar
con los videojuegos un promedio máximo de una hora diaria o esto debe estar
sujeto a las actividades que el niño lleve a cabo y a su comportamiento
progresivo con respecto a estos videojuegos.
Entre algunas de sus ventajas podemos citar las
siguientes:
- Favorecen la organización espacio-temporal.
- Coordinación oculomotora.
- Desarrollo de destrezas básicas como la rapidez de reflejos y la memoria.
- Puesta en práctica de estrategias.
- Desarrollan el instinto de superación.
- Algunos permiten mejorar y acrecentar la rapidez de razonamiento.
- Estimulan la concentración, por lo que pueden ser muy adecuados para niños hiperactivos o con déficit de atención.
- Puede favorecer el contacto social y la participación en actividades comunes con otros niños al intercambiar videojuegos.
- Superación en el niño, pues muchas veces perderá y tendrá que intentarlo de nuevo hasta que consiga su objetivo.
- Aumento de la tolerancia frente al fracaso.

El uso de los videojuegos también cuenta con
inconvenientes que en general son:
- Pueden producir nerviosismo y ansiedad.
- Pueden transmitir valores inadecuados.
- Pueden provocar un cierto retraso en el proceso de socialización e incluso un aislamiento.
- La excesiva estimulación de concentración puede llegar a provocar falta de atención hacia su entorno.
Algunas otras pautas que pueden servir a los padres
para controlar un uso racional de los videojuegos:
- En primer lugar debemos hacer propuestas alternativas de ocio puesto que depende de los padres que los hijos se interesen por otras actividades.
- Otra sería interesarnos por todo lo que rodea al videojuego y acompañar al chico en algunos momentos de juego..., es la mejor manera de compartir intereses con él, de conocer su mundo y sus inquietudes. Como padres nos podemos asomar también a este mundo que desborda la imaginación; nosotros también viviremos con nuestros hijos aventuras, trazaremos estrategias, adoptaremos distintas personalidades y desarrollaremos habilidades en este mundo fascinante. Sólo así sabremos qué es lo que atrae a nuestros hijos, les emociona y ¿por qué nos preocupa a nosotros?
- De los padres depende así mismo la selección de estos juegos, eligiendo aquellos que no contengan tintes sexistas, violentos o insolidarios. Los hay de estrategia como: el ajedrez o los deportivos; de aventuras fantásticas (muy solicitados) y educativos (la mayoría para ordenadores).En general podemos apuntar las siguientes normas fundamentales:
- Debemos elegir un juego que permita grabar la parte del juego que ha sido realizada.
- Son recomendables aquellos juegos que permiten intervenir a más de un jugador.
- Los juegos que tienen un número interminable de pantallas generan ansiedad porque no se ve el momento de llegar al final.
- Los valores que aparecen implícitos deben ser de nuestro agrado.
- No son recomendables los juegos que incluyen violencia gratuita o que fomentan la destrucción.

No olvidemos que el uso
excesivo de los videojuegos solo traerá consecuencias perjudiciales;
por eso, tienes que ponerle horarios a tu niño, y si es posible, siempre tienes
que estar supervisándolo.